Grados de obesidad
Grados de obesidad y sus consecuencias en la salud.
Un enfoque fácil para determinarlo en mi persona.
Para iniciar este artículo sobre obesidad y sus consecuencias en la salud de las personas voy a empezar usando la definición que la Organización Mundial de la Salud (OMS) trae sobre este trastorno del peso corporal: “La obesidad es una enfermedad crónica y progresiva que disminuye la calidad de vida y aumenta los riesgos de enfermar y de morir como consecuencia de ella”. Organización Mundial de la Salud (OMS).
Miremos un poco en el interior de esta definición.
La obesidad es una enfermedad
Hoy por hoy, después de una lucha denodada de muchas personas relacionadas con el tema, se ha logrado aceptar que el problema no es cuestión de estética sino que se trata de una verdadera enfermedad, como lo es la hipertensión, la diabetes, el alcoholismo o la drogadicción; incluso estas dos últimas fueron reconocidas como enfermedades mucho antes que la obesidad.
Crónica y progresiva
Crónica significa que no se trata de una enfermedad curable como lo es un resfriado o una apendicitis aguda; pero la buena noticia es que la obesidad es una enfermedad controlable con tratamiento médico o quirúrgico y se puede prevenir sus efectos letales sobre la salud o frenar los que ya han aparecido, incluso reversar muchos de ellos. La obesidad es progresiva, tiene la connotación que si no se hace nada por controlarla, con el tiempo la tendencia será a estar más obeso cada vez y las consecuencias no se harán esperar con seguridad. Estos dos calificativos nos centran en la necesidad imperiosa de ejercer acciones efectivas de distinto tipo y no quedarnos sentados esperando lo previsible.
Aumenta los riesgos de enfermar
La obesidad se considera hoy en día como un factor de riesgo real de enfermedades graves como la hipertensión arterial o presión arterial alta, la diabetes o azúcar alto en la sangre, las dislipidemias o trastornos del colesterol y los triglicéridos, las enfermedades circulatorias como la enfermedad coronaria que lleva al infarto cardíaco, la enfermedad cerebrovascular que produce los derrames y las trombosis cerebrales con sus secuelas de parálisis o muerte súbita; las artrosis de grandes articulaciones que llevan a daño de importantes áreas que cargan peso como las caderas y las rodillas. Muchos tipos de cáncer son asociados con la obesidad: estómago, colón, glándula mamaria, matriz, ovario; enfermedades relacionadas con el sueño y el estado de alerta como la apnea del sueño y la somnolencia; la lista continúa con un número muy grande de otros trastornos que están emparentados con el exceso de peso: cálculos de vesícula biliar, reflujo gastroesofágico, várices de las piernas, prostatismo, impotencia, infertilidad, infecciones de la piel y de la orina, entre muchas otras. No debo dejar de mencionar los menospreciados, mal interpretados y devastadores problemas de índole psicosocial que la enfermedad enfrenta: depresión, ansiedad, aislamiento social voluntario o provocado por el rechazo social, familiar, laboral; ellos en conjunto responden en mayor medida por el deterioro de la calidad de vida que el paciente obeso padece, más aun que lo que representan las enfermedades orgánicas ya discutidas (comorbilidad).
Riesgo de morir como consecuencia de ella
Se sabe que los individuos con obesidad tienen riesgo para su vida en razón de las enfermedades cardiovasculares que padecen; por esta razón no solo se aconseja el tratamiento agresivo de la enfermedad sino que se convierte en un imperativo que sólo quien desconoce el tema, pone en duda. Se sabe que un paciente con obesidad mórbida (que tiene el doble de su peso ideal) con solo perder un 10% de su exceso de peso, alcanza beneficios para su salud que no se obtienen con el uso de medicamentos para el control de las enfermedades asociadas.
Ejemplo: si un paciente con 150 kg de peso corporal con hipertensión, diabetes y dislipidemia, cuyo peso ideal fuera 70 kg, pierde 8 kg (aproximadamente el 10% de su exceso de peso. Exceso de peso= 150 – 70 kg = 80 kg x 10% = 8 kg), las enfermedades asociadas (comorbilidad) se mejoran inmediatamente; si la pérdida continúa, obviamente los beneficios se incrementan.
Dejando ya de lado el análisis de la definición, veamos un poco sobre la forma como los médicos clasificamos la enfermedad para poder decirle al paciente que grado de enfermedad padece y poderle recomendar un tratamiento lógico y efectivo más allá de la infinidad de “tratamientos” empíricos sin fundamento científico ni efectividad a largo plazo.
Cuando hablo a mis pacientes en la consulta sobre éste problema me remito a la gráfica a continuación, donde pongo en una escalera los distintos grados de la enfermedad, empezando en el primer escalón con aquellos individuos que tienen la fortuna de mantener un peso adecuado para su estatura, edad y sexo; éste grupo corresponde a los individuos que tienen un índice de masa corporal (IMC) entre 18 y 25 con promedio de 20; ya conocimos en otro documento qué es el IMC (Documento: “El primer paso”).
- Tabla: clasificación de la severidad de la obesidad según el IMC.
En los escalones siguientes voy poniendo por grupos a los pacientes en grado de severidad cada vez mayor del exceso de peso; les digo que los pacientes del primer escalón, NORMAL (amarillo), están como en la playa, donde usted se puede asolear, descansar, dormir, leer un libro, tomar jugo y no le pasa nada; ¡ESTÁ SEGURO!
Si usted aumenta un poco de peso, hasta un 10% aproximadamente o está en un IMC entre 25 y 30, usted tiene SOBREPESO y es como estar en la orillita de la playa donde hasta los niños juegan y no corren riesgo mayor; usted es capaz, con un poco de esfuerzo y disciplina, de SALIRSE SOLITO.
Este grupo, tiene riesgo para su salud pero tiene la ventaja a favor de poder reversar su problema sin tener secuelas o riesgo mayor para su vida si así lo desea; el problema sería, que no se hiciera ésto y se progresara al siguiente escalón donde las cosas se ponen difíciles; este escalón cambia de color, a la gama de los azules, porque como usted conoce, el mar profundo tiene éste color bien distinto del amarillo de la playa y la orilla, sitios que hemos señalado como más seguros. A partir de éste momento entramos en el terreno de la enfermedad como ya discutimos; internacionalmente, hablamos de 3 grados de obesidad:
Esta última, obesidad grado III se le conoce como obesidad mórbida porque se asocia a las otras enfermedades que ya discutimos. Igual que pasa en el mar, mientras más adentro nos arriesgamos, más difícil es salir solos y necesitamos de ayuda externa para poder regresar o nos ahogamos indefectiblemente. Usted ya conoce como calcular su índice de masa corporal (IMC), luego le es posible saber dónde está ubicada en la tabla; en estos grados de obesidad va a necesitar una ayuda profesional que le recomiende el tratamiento que más se adapte a su enfermedad y le brinde la mayor posibilidad de recuperación. Le aconsejo no demorar la toma de esta decisión pues cada día las expectativas son de estar más enfermo(a).
Bueno, para finalizar, te debo decir que esta información básica nutrirá tus conocimientos para que puedas asumir con mayor responsabilidad y seguridad el papel que debes jugar en esto de mantener tu nivel de peso.